sábado, 28 de noviembre de 2009

Diferentes realidades



Parece imposible a un día del últimísimo partido del siglo ofrecer un punto de vista que no se haya dado ya. Las posibles bajas de Ibrahimovic y Messi, la reaparición del deseado Cristiano Ronaldo, el 2-6, aún en la memoria de todos, y los clásicos piques entre jugadores antes de un clásico ocupan los titulares de la prensa de todo el país intentando calmar las ansias de fútbol de todos aquellos que mañana a las 7 no despegarán un ojo del televisor.

Barcelona y Real Madrid vienen ambos en una dinámica positiva con los números en la mano, pero ofreciendo más dudas de las que ambos quieren ante un enfrentamiento que, si bien no será decisivo, marcará la trayectoria próxima de los dos equipos. El Madrid de Pellegrini es el actual líder de la liga BBVA, pero en sus últimos enfrentamientos caseros ante equipos débiles como el Racing de Santander y el Zurich las dudas han crecido al no ser capaz de doblegarlos con la fiereza que se le supone a un equipo al que respalda una inversión tan seria. El Barcelona, por su parte, viene de ganar al Inter en un partido clave de Champions con el hándicap añadido de las bajas de Messi e Ibrahimovic, dos de sus jugadores clave. Por otra parte, los de Guardiola parecen brillar a arreones y no terminan de mostrarse tan sólidos como el año pasado, sobre todo fuera de casa.

Tanto se ha escrito antes de este duelo de titanes como todo lo que se escribirá después. Pero lo cierto es que aunque ambos equipos pasan por un momento similar, una posible derrota dejará a unos más tocados que a otros. Si el Madrid gana, el Barcelona quedará a 4 puntos, una distancia salvable a todas luces, y a buen seguro los azulgrana conseguirían desquitarse en los próximos enfrentamientos ligueros de la posible derrota ante el máximo rival. Pero si es el Madrid el que cae en el Camp Nou, pese a la pírrica diferencia que quedaría en la clasificación, los blaugrana habrían dado un golpe mucho más serio de lo que cabe pensar. El Real Madrid habría perdido ya ante Sevilla, Milan y Barcelona, y los culés habrían enseñado sus cartas sobre la mesa al mostrarse como un conjunto mucho más hecho que el todavía recién parido proyecto de Florentino Pérez, aparte de dejar a Pellegrini en una situación comprometida.

Muchos, este verano, preveyendo que éste sería el clásico en el que se verían las caras Kaka', CR9, Benzema y Xabi Alonso con los Ibrahimovic, Messi, Iniesta y Xavi Hernández lo catalogaron como el partido del siglo. Pero la baja forma en la que vienen algunos de estos jugadores hace que el protagonismo, en esta ocasión, recaiga más sobre los conjuntos. Y es por eso que el Barcelona se presenta como gran favorito. Juega en casa, donde el Madrid sólo ha conseguido créditos en los momentos más duros de la historia reciente culé, y su juego colectivo viene reforzado tras una exhibición ante el 4 veces campeón de Italia. El Madrid, sin embargo, viene con la espada de Damocles sobre su cabeza, con poco que ganar y mucho que perder, un entrenador discutido, un juego colectivo que plantea muchas preguntas y su gran estrella fuera de forma. Pero los tópicos son tópicos por algo, y es que en un partido así , el favorito no es siempre el que gana (también, aunque puedan tener razón, resulta algo repulsivo escribir obviedades de tal calibre).

1 comentario:

  1. Fue, a todas luces, un duelo de titanes en el que volvió a aparecer el ahora (incomprensiblemente a mi juicio) discutido Valdés.

    Y no he hecho referencia a lo del 'duelo de titanes' por hacerla. :P

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